Esfuerzo versus disfrute
Tal vez eres de las que vió o escuchó a sus padres y abuelos hablar de su trabajo desde el esfuerzo y el sacrificio.. Eso era lo habitual, lo esperable, si era trabajo! Tenía que ser así. Y si bien hoy ese concepto ha cambiado en muchos aspectos, muchas mujeres viven eso de “El trabajo es trabajo; el disfrute está fuera del trabajo.”
Tal vez vives el trabajo y la vida como compartimentos estancos, separados. Como si uno no tuviera nada que ver con el otro. Tal vez desde tu profesión, lugar o cargo, vives el lunes como el inicio de lo que no quieres, cuentas los días para que sea viernes, y a las 9am estás contando las horas para que sean las 17h. Y en zafra o picos de trabajo, deseando que se termine para estar en ritmo habitual. Seguro eres responsable, correcta, cumplidora, eficiente y extremadamente profesional en lo que haces. Pero te falta la pertenencia, el sentido y la conexión que te gustaría tener en relación a tu trabajo.
El disfrute está fuera de lo que es trabajo. El fin de semana es todo lo que está bien. Pero el domingo … de nuevo a pensar en la semana laboral. Ese ciclo se repite y no tiene nada que ver con el dinero, los beneficios, el ambiente laboral, o las comodidades que te brinda tu carrera. Aún así, es trabajo. Y tú precisas integrar tu hacer laboral a la vida que quieres tener. Necesitas coherencia entre tu trabajo y la vida que quieres tener. Necesitas alinear tu Ser con tu Hacer. Y que tu nuevo trabajo sea sinónimo de disfrute, goce, expansión, conexión y disfrute!
Te invito a reflexionar sobre ese trabajo integrado a tu vida desde ese disfrute, te invito a que pienses en las posibilidades que hay más allá de tu entorno inmediato y que te lleven al trabajo que necesitas en esta etapa de tu vida: un trabajo con el que conectas, que te devuelve sentido, que te trae disfrute, sentido de pertenencia y que económicamente sea rentable. Te invito a que vuelvas a pensarte y busques a la mujer que sabe lo que quiere y lo que no quiere para su vida. Te invito a confiar en tí, en tu experiencia, tu madurez, tu sentido común. Todo está en tí. Hazlo jugar a favor de tí y de la vida que quieres vivir.